La hipoacusia (pérdida de la audición) es uno de los trastornos más comunes. Se estima que cada año nacen en México 6 mil niños con alteraciones auditivas de distinto grado, y hay más de 7.5 millones de personas con hipoacusia.

Las causas pueden ser hereditarias o resultado de otros factores: complicaciones en el parto (nacimiento prematuro o con bajo peso), mal uso de medicamentos ototóxicos, traumatismo, enfermedad o exposición al ruido.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la prevención primaria puede evitar la mitad de los casos de pérdida de audición. Asimismo, un gran porcentaje de las personas que sufren pérdida de audición podría mejorar su situación mediante la detección e intervención tempranas y el tratamiento adecuado.

Sin alarmarte, debes tomar en cuenta los siguientes datos y consultar al médico, si tú o un miembro de tu familia está en alguno de los siguientes casos.

• Bebés con antecedentes familiares de sordera, nacidos de forma prematura, con bajo peso o han sufrido asfixia del parto, ictericia (coloración amarilla) o meningitis.

• Niñas y niños que han padecido sarampión, meningitis, rubéola y parotiditis.

• Personas expuestas constantemente a ruidos fuertes (por trabajo o por actividades recreativas, como escuchar música a volumen alto). Según la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA), el nivel de ruido en el ambiente no debería nunca ser mayor a 70 decibeles. No obstante, sólo el ruido de una calle transitada suele ser mayor a los 100 decibeles.

En cualquier caso, la Asociación Mexicana para el Diagnóstico y Tratamiento de la Sordera A. C. recomienda acudir una vez al año a realizarse estudios de audiometría, para garantizar nuestra salud auditiva.

skucha

Auxiliares auditivos y consultas

Tel. 615 04 53

Blvd. Belisario Domínguez  1849, Local 6