“El enojo, el orgullo y la competencia son nuestros verdaderos enemigos. Nunca se puede ser feliz con actitud de ira.”

El actual Dalai Lama (el decimocuarto) nació en el seno de una familia de campesinos pobres tibetanos en el pequeño poblado de Takster. El Dalai Lama era considerado reencarnación de la divinidad. Cuando un Dalai Lama muere, se cree que  su alrededor entra en el recién nacido, que tras ser identificado, por determinadas pruebas tradicionales, se convierte a su vez en el nuevo Dalai Lama. Con sólo dos años de edad, tales visiones proféticas del Lama del monasterio de Sera, Kewtsang Rinpoche,  identificaron  a Tenzin como el  Dalai Lama.

Los Dalai Lama son seres santos que renuncian al Nirvana, la paz eterna, y acceden a reencarnarse para continuar guiando a las personas durante su larga travesía terrenal.

A los cuatro años de edad fue ordenado monje budista y entronizado como XIV Dalai Lama del Tíbet. El Dalái Lama tenía la capacidad de memorizar y comprender los textos esotéricos en su primer intento estableciendo su reputación como un maestro por encima de todos los demás monjes a los 9 años.

Inició sus estudios monásticos a los seis años y a los 24 presentó los exámenes preliminares de las tres principales universidades monásticas: Drepung, Sera y Ganden. En 1959 obtuvo el grado de Gueshe Lharampa (Doctorado en Filosofía Budista).

El 17 de noviembre de 1950, a sus 15 años asumió el poder político tras la invasión del Ejército Popular de Liberación de China a su país. Ya como Jefe de Estado viajó, en 1954, a Beijing para hablar con Mao Tse-tung y otros líderes chinos, y así establecer la paz, lo que resultó en vano. En marzo de 1959 se produjo el levantamiento nacional tibetano en contra de la ocupación militar china, el cual fue reprimido con brutalidad.

Por tal fracaso el Dalai Lama se exilió a la India, y fue seguido por unos 80.000 tibetanos. Se estableció, en Dharamsala (donde vive hoy), población conocida como la pequeña Lhasa. Ahí se constituyó la sede del Gobierno Tibetano en el Exilio, una democracia constitucional desde 1963. Desde allí empezó a ayudar a los exiliados tibetanos y a buscar una propuesta de solución para el Tíbet.

“Para crear una paz interior, lo más importante es la práctica de la compasión y el amor, la compresión y el respeto por los seres humanos. Los más poderosos obstáculos para ello son la ira,  el odio, el temor y el recelo. De modo que, mientras la gente habla de desarme en el mundo entero, cierto tipo de desarme interno es prioritario.”

El 10 de diciembre de 1989 le fue concedido el premio Nobel de la Paz, por su resistencia constante a uso de la NO VIOLENCIA, en la lucha de su gente para recuperar la libertad, dando a conocer al mundo entero el Conflicto del Tíbet y la situación en su país. Es miembro del Comité de honor de la Coordinación internacional para el Decenio de la no violencia y de la paz.

El difícil camino de la paz

El Dalai Lama es, según la tradición, el líder espiritual y temporal del Tíbet. El término viene del mongol “dalaï”, océano, y del tibetano “bla-ma”, maestro espiritual; y se traduce como “océano de sabiduría”.

Actualmente, Tenzin Gyatso, figura internacional que se define a sí mismo como “un simple monje”, viaja por todo el mundo hablando en pro del pueblo tibetano, su autonomía respecto de China e impartiendo enseñanzas budistas. Reputado por su jovialidad, su estilo enérgico y profundo, y su erudición, ha dado frecuentes discursos públicos que han sido transcritas en más de un centenar de libros.

Un dato: Es vegetariano y promueve que la gente lo sea, inspirado por el mensaje de “gran compasión” (mahakaruna). Entre algunas de las campañas que ha hecho para promoverlo, está el solicitar a los restaurantes de Daramsala que se volvieran vegetarianos, con resultados positivos, o que una cadena de comida rápida a base de pollo de pollo no abriera establcimientos en el Tíbet.

Nombre del personaje: Tenzin Gyatso el Dalai Lama

Fecha de nacimiento: 6 de julio de 1935

Origen: Takser (Amdo)

Actividad: Líder religioso tibetano