Un verdadero coloso de los mares, el crucero Freedom of the Seas, llegó a Miami e hizo muestra de todos los lujos y detalles que a partir de ahora ofrecerá a sus pasajeros.

Se trata del barco crucero más grande del mundo, con capacidad para 4,375 pasajeros y 1,360 tripulantes.

Entre otras cosas, este barco tiene:

1,818 camarotes diseñados para recibir a familias enteras o grupos de amigos, equipados con televisión de pantalla plana, baño privado, minibar y aire acondicionado.

Piscina para deportes acuáticos, centros de gimnasia y aeróbicos, hasta un ring de boxeo y un spa, instalaciones para práctica de deportes como atletismo o baloncesto, “rockódromo” para escalada deportiva, una pista de patinaje sobre hielo.

El teatro Arcadia, un cine para películas de estreno, zona comercial de más de cien metros de longitud y un auditorio para 1,350 personas.

Además, el nuevo barco cuenta con un casino, 16 bares y 10 restaurantes que ofrecen recetas de diferentes países del mundo.

Se estima que Royal Caribbean Cruises invirtió $870 millones para construir ésta ciudad flotante de 338 metros de largo, 56 metros de ancho, 14 plantas y 160,000 toneladas.

El navío realizará cruceros de siete noches que incluyen Cozumel, México; Georgetown, Islas Caimán; Montego Bay, Jamaica, y Labardee, Isla de Hispaniola.