Con solo cinco ingredientes, este plato tiene un toque de sofisticación, ideal cuando se tiene invitados entre semana.

  • 4 pechugas de pollo deshuesadas, sin piel
  • Aceite de oliva, para engrasar
  • 140 g de queso cheddar, rallado
  • 1 cucharada colmada de mostaza en grano
  • 3 cucharadas de leche,
  • preferentemente entera
  • 150 g de tomates cherry
  • Brócoli y papas asadas como guarnición.

Preparación:

  • Precalentar el horno a temperatura de 200º C/gas 6/ convección 180º C. Cortar las pechugas en filetes para que el tiempo de cocción sea menor. Untar ligeramente con aceite una bandeja para el horno y colocar el pollo en una sola capa Mezclar el queso con la mostaza y la leche, y verter sobre cada filete de pollo.
  • Repartir los tomates, en ramilletes, entre las piezas de pollo, y cocer durante 20-30 minutos, hasta que el pollo esté dorado y los tomates blandos.
  • Servir acompañados de brocoli y papas.

Sugerencia: aplastar los tomates en el plato, para que se mezclen con la salsa de queso.

Tiempo de preparación: 35 minutos – 4 raciones.