La figura de Frida y su obra son un desafío a cualquier definición categórica, encasillarla sería cortarle las alas con las que volaba. Frida la de espíritu rebelde y apasionada de su vida; se alternaba entre la esperanza y la desesperación. Le encantaba las multitudes, bailar, cantar, coquetear y seducir; sin embargo, a veces se sentía miserablemente sola y rogaba a sus amigos y amantes que la visitaran o que no la “olvidaran”. Poseía un agudo sentido del humor, usualmente un marcado humor negro al igual que, una disposición muy aguda a la inventiva y la metáfora.

Frida Kahlo comenzó a pintar después de un trágico accidente que la mantuvo en cama por varios meses, para matar el aburrimiento pintaba con las acuarelas de su padre, al ver su madre la intención de Frida decide mandarle hacer un caballete e instalarle un espejo en el cielo raso de la cama, para darle cabida a una serie de autorretratos; Kahlo decía “pinto autorretratos por que estoy gran parte de mi tiempo sola, por que soy la persona a quien mejor conozco”. Frida siempre se esmeró por mantener un hogar para Diego y amaba preocuparse por él, prepararle comida y bañarlo, protagonizaron la historia de amor más extravagante en la humanidad.

“No sé si mis pinturas son o no surrealistas pero, lo que sí estoy segura es que son la expresión más franca de mi ser”

Le encantaba rodearse de mascotas exóticas como monos arañas y perros, adoraba a los niños los que siempre trataba como iguales. Gustaba de los chismes, chistes subidos de tono, en cambio, aborrecía la pretensión. Trataba a los sirvientes como a su propia familia y a los estudiantes como colegas muy estimados. Frida Kahlo era la personificación de la alegría, un anhelo por la vida. Valoraba la honestidad, especialmente la propia. Una vez le escribió a un antiguo amante, quien abiertamente la había dejado por su debilidad física, “tú mereces lo mejor de lo mejor porque, tú eres una de esas pocas personas que, en este mísero mundo siguen siendo honestas consigo mismas y esa es la única cosa que realmente cuenta”.

Cuando Frida Kahlo muere a los 47 años de edad, el 13 de Julio de 1954, dejó una serie de pinturas que corresponden a la representación de evolución como persona, al igual que, una serie de emotivas cartas a amantes y amigos junto con un colorido y cándido diario. Frida Kahlo el ícono de fuerza, solidez, amor y pasión, todo esto indiscutible evidencia de que su vida no fue nada menos que una búsqueda por ser honesta consigo misma.

“Como mis temas han sido siempre mis sensaciones, mis estados de ánimo y las reacciones profundas que la vida ha producido en mí, yo lo he llevado objetivamente y plasmado en las figuras que hago de mi misma, que es lo más sincero y real que he podido hacer para expresar lo que yo he sentido dentro y fuera de mí misma”.

Biografía

Nombre del personaje: Magdalena Carmen Frida Kahlo y Calderón

Fecha de nacimiento: 6 de julio de 1907

Fecha de fallecimiento: 13 de julio de 1954

Origen: Coyoacán, Distrito Federal

Actividad: Pintora

Época: Contemporánea