Los nuevos ricos, empresarios y famosos, en la actualidad, no saben en qué derrochar su dinero, esto sucede cuando los yates de lujo, aviones privados o mansiones ya no son suficientes y optan por adquisiciones cada vez más excéntricas. Conoce algunos de los ricos y sus caprichos.

La pareja de famosos cantantes Beyoncé y su marido Jay-Z, con motivo del primer cumpleaños de su hija Blue Ivy, de regalo le compraron una Barbie muy especial, cuenta con 160 piedras de diamantes, así como incrustaciones de oro blanco. Ellos querían que su primer cumpleaños fuese especial para el resto de su vida, el obsequio costó ochenta mil dólares.

Para los millonarios no existe la crisis y para saciar su sed de exclusividad gastan su fortuna en compras excéntricas. 

Si de gastos para mascotas se trata hay que hablar de la empresaria Paris Hilton y su adoración por los animales, tal cariño le llevó a pagar una suma extraordinaria para comprar por más de un millón de dólares un trozo de tierra al lado de la tumba de Marilyn Monroe para enterrar a una de sus mascotas. Otro millonario que le gusta consentir de forma millonaria a sus adorados animalitos es David Duffield, quien es dueño de una empresa de computación, gastó siete millones de dólares en construir una casa de lujo para sus animales, que incluye departamentos con paredes de vidrio para los perros, alfombras y televisores incluidos.

Uno de los gustos carísimos es el que se dio Jasper Sanfilippo, este multimillonario se ha convertido en el hombre más envidiado por los amantes de la música, posee una gran colección de instrumentos musicales, dentro de los cuales destaca su mayor joya, es el órgano de tubos más grande del mundo que él mandó construir en su propia casa, este enorme instrumento con 8,000 tubos diferentes costó dos millones de dólares.

El multimillonario Huang Qiaoling, mandó a construir en su ciudad de origen Hangzhou, una réplica exacta de la Casa Blanca, esta excentricidad es valorada en diez millones de dólares. El coleccionista de arte, Cheska Vallo, hizo una compra millonaria en una subasta, un sillón conocido como el “Asiento de los Dragones”, es el sillón más caro del mundo, su actual dueño lo compró en 27 millones de euros.