A estas alturas, ya te habrás enterado de sobra de las afirmaciones que unas cuantas semanas atrás hiciera la Organización Mundial de la Salud acerca de los alimentos que pueden darte cáncer. Por eso, tal vez sea hora de que te plantees un cambio de hábitos. Te ayudamos con algunos consejos.

1. Cambia tus sartenes. El teflón libera gases cancerígenos; y el acero inoxidable, metales pesados. Las alternativas serían las sartenes de nanocompuestos cerámicos, de esteatita, de aluminio (anodizado) o con recubrimiento de titanio. Eso sí: ahorra, porque no son baratos.

2. Evita sopas instantáneas. En México se consumen 4.5 millones de sopas instantáneas ¡por día! Comerlas dos veces a la semana aumenta el riesgo de padecer síndrome cardiometabólico, que puede provocar enfermedades cardiacas, diabetes o derrames cerebrales.

3. Aléjate del ruido. La OMS advierte que 1,100 millones de jóvenes de todo el mundo están en riesgo de sufrir pérdidas de audición por exposición cotidiana al ruido. Regula el volumen de tus aparatos.

4. Cuidado con el celular. Las personas miran su teléfono móvil al menos 110 veces al día. El 53% de ellas se encorvan y padecen dolor en el cuello; y más del 80%, también en las manos. Además, los niños suelen tensar la quijada de forma involuntaria al jugar con el teléfono, lo que ocasiona problemas en los dientes al crecer.

5. Relájate: vivir mata. Buena parte de los hábitos de la vida moderna son potencialmente dañinos para tu salud. Tal vez no puedas evitarlos. La clave en ese caso es tomarlo con filosofía y procurar la moderación en todo. Buena suerte.